viernes, 26 de noviembre de 2010

Homenaje a Luis Rosales en el centenario de su nacimiento

El próximo lunes 29 de noviembre se celebrará la primerra sesión del Homenaje a Luis Rosales en el año de su centenario, consistirá en la proyección del documental, Asi he vivido yo, de Emilio Ruiz Barranchina y contará también con la intervención de Luis Rolsaes Fouz. Al día siguiente, el martes 30, se realizará una mesa redonda con la participación de Luis Alberto de Cuenca, Antonio Rey Hazas, Antonio Hernández y Luis Rolsaes Fouz. Los dos actos empezarán a las 19: 00 horas en la Biblioteca Nacional, Paseo de Recoletos, nº 20.
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Ciego por voluntad y por destino



Porque todo es igual y tú lo sabes,
has llegado a tu casa, y has cerrado la puerta
con ese mismo gesto con que se tira un día,
con que se quita la hoja atrasada al calendario
cuando todo es igual y tú lo sabes.
Has llegado a tu casa,
y, al entrar,
has sentido la extrañeza de tus pasos
que estaban ya sonando en el pasillo antes de que
llegaras,
y encendiste la luz para volver a comprobar
que todas las cosas están exactamente colocadas
como estarán dentro de un año;
y después,
te has bañado, respetuosa y tristemente, lo mismo
que un suicida,
y has mirado tus libros como miran los árboles sus
hojas,
y te has sentido solo,
humanamente solo,
definitivamente solo porque todo es igual y tú lo sabes.

Has llegado a tu casa,
y ahora querrías saber para qué sirve estar
sentando,
para qué sirve estar sentado igual que un náufrago
entre tus pobres cosas cotidianas.
Sí, ahora quisiera yo saber
para qué sirve el gabinete nómada y el hogar que
jamás se ha encendido,
y el Belén de Granada
–el Belén que fue niño cuando nosotros todavía
nos dormíamos cantando–
y para qué puede servir esta palabra: ahora
cuando empieza la nieve,
cuando nace la nieve,
cuando crece la nieve en una vida que quizás está
siendo la mía,
en una vida que no tiene memoria perdurable,
que no tiene mañana,
que no conoce apenas si era clavel, si es rosa,
si fue azucenamente hacia la tarde.

Sí, ahora
me gustaría saber para qué sirve este silencio que
me rodea,
este silencio que es como un luto de hombres solos,
este silencio que yo tengo,
este silencio
que cuando Dios lo quiere se nos cansa en el
cuerpo,
se nos lleva,
se nos duerme a morir
porque todo es igual y tú lo sabes.

Sí, he llegado a mi casa, he llegado,
desde luego, a mi casa,
y ahora es lo de siempre,
lo de nogal diario,
los cuadros que aún no he tenido tiempo de colgar
y están sobre la
mesa que vistió de volantes mi hermana,
la madera que duele,
y la pequeña luz deshabitando la habitación,
y la pequeña luz que es como un hueco en la
penumbra,
y el vaso para nadie
y el puñado de sueño,
y las estanterías,
y estar sentado para siempre.
Sí, he vuelto de la calle; estoy sentado;
la nieve de empezar a ser bastante
sigue cayendo,
sigue cayendo todo, sigue haciéndose igual,
sigue haciéndose luego,
sigue cayendo,
sigue cayendo todo lo que era Europa, lo que era
mío y había llegado
a ser más importante que la vida,
lo que nació de todos y era como una grieta de luz
entre mi carne,
sigue cayendo,
sigue cayendo todo lo que era propio,
lo que ya estaba liberado,
lo que ya estaba descolorido por la vida,
sigue cayendo,
sigue cayendo todo lo que era humano, cierto y frágil
lo mismo que una niña de seis años que llorara
durmiendo,
sigue cayendo,
sigue cayendo todo,
como una araña a la que tú vieras caer,
a la que vieras tú cayendo siempre,
a la que vieras tú mismo,
tú, tristemente mismo,
a la que vieras tú cayendo hasta que te tocara en la pupila con sus patas velludas,
y allí la vieras toda,
toda solteramente siendo araña,
y después la sintieras penetrarte en el ojo,
y después la sintieras caminar hasta adentro,
hacia dentro de ti caminando y llenándote,
llenándote de araña,
y comprobaras que estabas siendo su camino
porque cegabas de ella,
y todavía después la sintieras igual,
igual que rota
y todavía…

–¡Buenas noches, don Luis! –.

Sí, es verdad que el sereno
cuando me abrió esta noche la cancela,
me ha recordado a la palabra “igual”;
me ha recordado
que estaba ya,
desde hace muchos años,
haciéndose gallego inútilmente
porque ya lo sabía,
porque ya lo sabía, y casi le zumbaba la boca como
un trompo,
a fuerza de callar
y de tener la cara expectante y atónita.
Sí, es verdad,
Y ahora comprendo por qué me ha recordado a la
palabra “igual”:
era lo mismo que ella,
era igual y tenía
las llaves enredadas entre las manos
pero sirviéndole para todo como sus cinco letras,
las cinco llagas de la palabra igual,
las cinco llagas que le sonaban luego,
que le sonaban igual que ayer y que mañana,
igual que ahora
siento de pronto,
ahogada en la espesura de silencio que me rodea,
como una vibración mínima y persuasiva
de algo que se mueve para nacer,
y es un ruido pequeño,
casi como un latido que sufriera,
como un latido en su claustro de musgo,
como un niño de musgo que porque duele tiene
nombre,
tiene ese nombre que únicamente puede escuchar
la madre,
ese nombre que ya duele en el vientre,
que ya empieza a decirse a su manera.

Y es un sonido de algo interior que vibra,
de algo interior que está subiendo a mi garganta
como el agua en un pozo,
igual que esa palabra que no has pensado aún
mientras la estás diciendo,
y después se hace radiante, ávido, irrestañable,
y ahora es ya la memoria que se ilumina como un
cabo de vela que se enciende con otra,
y ahora es ya el corazón que se enciende con otro
corazón que yo he tenido antes,
y con otro que yo entristezco todavía,
y con otro
que yo puedo tener, que estoy teniendo ahora,
un corazón más grande,
un corazón para vivirlo, descalzo y necesario,
un corazón reunido,
reunido de otros muchos,
igual que un olor único que hacen diversas flores;
y pienso
que quizás estoy ardiendo todo,
que se ha quemado la palabra “igual”,
nos vibra el corazón como cristal tañido;
nos vibra,
está vibrando ya con este son que suena,
con este son, con este son que suena enloqueciendo
ya la casa toda,
mientras que se me va descoloriendo el alma
por una grieta dulce.
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del libro, La casa encendida /Rimas. Ed. Vitruvio. Número 218 de la Colección Baños del Carmen

viernes, 19 de noviembre de 2010

Presentación de Segura tierra, de Vicente López-Ibor Mayor

El próximo lunes, 22 de noviembre, se presentará el libro, Segura tierra, de Vicente López-Ibor Mayor, que será presentado por el poeta Fernando García Román, y será en La Casa del Libro de Hermosilla, en el número 21, a las 19: 30 horas.




Infinitamente Luna
Luna de puertas
abiertas
Luna asomada
a la Luna
Luna gestante
en silencio
Infinitamente Luna
Luna de cauces y puertos
Luna rendida
a la Luna
Luna de amor
en tu cuerpo


Segura tierra, de Vicente López-Ibor Mayor, Colección Covarrubias. Ediciones Vitruvio

lunes, 15 de noviembre de 2010

Presentación de Fuga de ideas, de Santiago Gómez Valverde

El próximo lunes, 15 de noviembre. se presentará el libro, Fuga de ideas, de Santiago Gómez Valverde. El acto será dentro del ciclo Panorama Literario, en el Auditorio del Centro, Calle José Hierro, nº 7, de Getafe, a las 20:00 horas. Será presentado por José Elgarresta.
Anochecer contigo



De vez en cuando, sueño con tus ojos.
Me miran y se marchan. Como cúmulos,
caminan pensativos. Como pájaros,
picotean la brisa de sus trinos.
Y pronuncian mi nombre con voz verde,
que es acuarela diluida. En lágrimas,
arrojan al vacío nuestras vidas.
Quiero incendiar la luz de esta mañana
para, en su hoguera, anochecer contigo.
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Fuga de ideas, de Santiago Gómez Valverde. Ed. Vitruvio. Número 235 de la Colección Baños del Carmen.

Nuestro adiós a Juan Polo Laso

El poeta Juan Polo Laso falleció el pasado 12 de noviembre en Madrid. Juan Polo Laso nació en Salamanca en 1935, vivió en varios países siendo Argentina donde estuvo durante un periodo más largo. Fue autor de varios libros de poesía y recogió en varias obras selecciones y antologías con la Navidad como tema de fondo. En 2003, publicamos su libro, Palabra y Misterio, una extensa y extraordinaria antología donde poetas de varias generaciones trataban el tema de Dios. En 2006 publicamos su libro, Mi voz enajenada, y hace poco menos de dos meses, su última obra, El temblor de las rosas, escrito en los días en que se sintió algo recuperado de su enfermedad y supo trasladar en su libro, un inmenso y brillante amor por la vida.
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Alegre noticia



Tu mensaje se alarga en la distancia,
hay arroyos de luna en tu mirada
y las nubes te abrazan con su aliento.
En las noches tu corazón florece
y a la mañana brilla tu alegría.
Yo sueño lentamente tus fervores
que me cuentan el río y las palomas.
Y el corazón me dice que son ciertos.
En el viento viaja mi albedrío
donde habita tu rostro suavemente.
Y te pienso pegada a mis afanes
alentando mi agobio con tu fuego.
Que me sigas teniendo en tu memoria
y me cobijen siempre tus latidos.
Que mis párpados se muevan en tus ojos
y tus manos se toquen con mis manos.
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Incluido en El temblor de las rosas, de Juan Polo Laso. Ed. Vitruvio. Número 234 de la Colección Baños del Carmen.

miércoles, 10 de noviembre de 2010

Presentación de Horizonte al noroeste, de José María Garrido de la Cruz

El próximo viernes, 12 de noviembre, se presentará el libro de prosa poética, Horizonte al noroeste, de José María Garrido de la Cruz. El libro será presentado en La casa del Libro, de la Calle Hermosilla, nº 21, a las 19: 30 horas, y será presentado por el poeta Alfredo Piquer.
Obertura



Tierra de hombres anónimos sólo recordados por las almas que circundan su misterio. Algunos nombres por desgracia, están ya grabados en las lápidas de sus tres cementerios, los dos antiguos que bordean sendas iglesias, y el moderno a la entrada, por el sur, como si de una frontera se tratase y a cuyos eternos moradores hubiera que pagar un cálido tributo.
Guarda entre sus sombras, volutas de sol y nieve, de viento y agua racheada…
A finales de los cincuenta llegaron el ferrocarril, la luz eléctrica, el agua, el teléfono, y la televisión en blanco y negro.
El progreso rompió el hechizo. Se hizo la luz, se perdió el encanto de los candiles.

jueves, 4 de noviembre de 2010

Presentación de Es el mismo navío el que nos lleva, de Pedro Javier Martínez Martínez

El próximo viernes 5 de noviembre, se presentará en la Universidad de Murcia, Campus de la Merced, Sala Jorge Guillén, a las 19: 30 Horas, el libro, Es el mismo navío el que nos lleva, de Pedro Javier Martínez Martínez, premio Internacional de Poesía Luys Santamarina-Ciudad de Cieza, 2010. El acto será presentado por Pedro Javier Martínez Alventosa.



Es tiempo de escribir mi biografía
antes de que el cerebro se disgregue
y las neuronas toquen a rebato
confundiendo sonidos y recuerdos.
Quiero anotar aquí, para que conste,
que me confieso tierno con ancianos
y con niños y, que a veces, no cuido
como debiera al hermano que sufre.
Aunque como descargo, os aseguro
que la injusticia oprime mi garganta
y que me falla el pulso si sorprendo
al hombre acuchillando los estómagos
con esa intolerancia prepotente.
Soy algo vanidoso, lo preciso,
soñador, indolente, perezoso,
porque nací en el Sur, y eso me marca,
y clasista, sin más, del intelecto.
He escrito libros, he plantado rosas
en jardines recónditos y umbríos
y he cumplido con Dios, multiplicándome
y creciendo en espíritu, a sabiendas
de no alcanzar la altura de gigante.
No dejo una gran huella, sólo el eco
de mi afán por cantar con la palabra
el hondo sentimiento que me ciñe

como zureo encelado de palomas
y desparrama al aire las vivencias
de este hombre que llevo entre los hombros.

Mientras vivo la vida y la contemplo
desvanecerse en mi reloj de arena,
está sacando brillo el estropajo
de mis carencias y debilidades
al viejo mobiliario de la mente,
para que en la visita de la dama
me libere de agravios y reproches.

Esta es mi biografía, amigos míos.
Como veréis, un pozo de virtudes…



Es el mismo navío el que nos lleva, de Pedro J. Martínez Martínez. XV Premio Internacional de Poesía Luys Santamarina-Ciudad de Cieza, 2010. Ediciones Vitruvio.